Luna en Escorpión

Luna en Escorpión

La Luna en Escorpión intensifica las emociones y la sensualidad. Los nativos pueden ocultar sus sentimientos y resentir el control. Atractivos pero con problemas en sus relaciones. La influencia de las mujeres es significativa.

La Luna está en su caída en Escorpión, lo cual nunca es una buena posición para ella. Escorpión saca el lado acuoso y sensual de la Luna, pero tiende a hacerla extremadamente positiva y apasionada. El efecto más notable de Escorpión es acentuar el poder sensual de la Luna y al mismo tiempo desplegar su contundencia. Escorpión es el signo astrológico de la muerte y la regeneración, también de los extremos de las emociones. Una Luna en Escorpión es una de las posiciones lunares más difíciles. Los nativos Escorpión-Luna son impulsados por fuertes pasiones que tienden a negar que son su motivación, a menudo se reprochan sus propias emociones, por ejemplo, su enfado o celos, e intentan mantener sus reacciones ocultas bajo una superficie tranquila y agradable, siendo capaces de un extraordinario autocontrol. Si una experiencia se vuelve demasiado dolorosa, se distancian de sus sentimientos y así aniquilan su dolor, en lugar de seguir sufriendo. Escorpión en la Luna, particularmente, teme cualquier forma de rechazo. Su capacidad para mitigar sus sentimientos le permite sentirse en control, y también es el camino para ralentizar la destrucción del espíritu. Por otra parte, las personas con esta posición son naturalmente hedonistas, y usan sus sentidos más como vehículos de placer que de conocimiento. Estas cualidades, lógicamente, pueden estar equilibradas por aspectos entre los demás planetas, y la interferencia de estos planetas puede eliminar la laxitud del signo, permitiendo así que sus cualidades científicas tengan un alcance más libre. Cuando Escorpión sigue el camino de la ciencia, su efecto es verdaderamente admirable, más así, tal vez, que cualquier otro signo. Los sentidos son extraordinariamente agudos y los poderes de observación casi ilimitados. La mente también reacciona de manera constante, ni demasiado rápida ni demasiado lenta, a sus impresiones, y a menos que haya alguna indicación contraria en el horóscopo, se indica una gran fuerza de voluntad, ya que las ideas presentadas conquistan la mente de manera tal que el nativo no puede descansar en la mera adquisición del conocimiento, sino que debe figurar, organizar y ofrecer al mundo lo que ha recibido. Las personas nacidas con la Luna en Escorpión poseen una enorme fuerza de voluntad y agudos poderes de observación. Sus juicios son astutos y precisos. Suelen poseer una memoria fenomenal; por lo general, esto es una gran ayuda para sus labores diarias, pero hace que les den muchas vueltas a las heridas emocionales. Algunos tipos de Escorpión – Luna nunca olvidarán y esperarán años para vengarse. Esto no significa necesariamente que sean crueles o vengativos, pero en cualquier momento de la vida pueden recordar súbitamente una injuria a su orgullo y evocar exactamente lo que la otra persona dijo y cuan contrariados se sintieron en ese momento. A pesar de esto, los nativos con la Luna en Escorpión suelen tener una naturaleza espiritual y sentimientos intensos que motivan sus acciones. Son muy inteligentes ocultando sus verdaderas emociones.

La tendencia a la sensualidad de los Escorpión-Luna es sin duda muy grande, este signo influye en la Luna más poderosamente que Venus. Aquí encontramos un peligro de promiscuidad, exceso o irregularidad sexual, y quizá una fuerte predisposición a la indulgencia en el licor. Su persistencia y determinación les permiten remontarse sobre los obstáculos, y esta posición de la Luna infortunadamente tiene más obstáculos que otras. Por lo general, los Escorpiones Lunares tienen una pena o problema secreto en la vida, que muy a menudo se refiere a problemas familiares o de salud. Sin importar cuál sea su signo de Sol, una Luna en Escorpión le otorga al nativo extraordinarias capacidades de autosuficiencia, una sensualidad única, y un atractivo magnético para influir sobre los demás.

Suelen dar mucha importancia a su trabajo, ya que es a través del trabajo y el esfuerzo que ellos son más capaces de expresarse. Poseen altos estándares, y el orgullo del trabajo bien hecho es visible en todos sus esfuerzos. Tienden a ser ambiciosos y se encuentran dotados de capacidades ejecutivas. Esto es especialmente cierto cuando su Sol o Ascendente se encuentran en un signo de Tierra como Tauro, Virgo o Capricornio.

Poseen cierta sensualidad que atrae al sexo opuesto, muchas veces sin que sean conscientes de ello. Esto es frecuentemente una fuente de dificultad en tu vida amorosa, y muchos se casan más de una vez. El temor a ser controlado suele ser el centro de sus problemas de relación. Es muy difícil que tengan plena confianza en otras personas, y les toma mucho tiempo para comprometerse plenamente. Sin embargo, una vez que se sienten libres de amenazas, son plenamente capaces de un profundo amor. Escorpión es el signo más débil, así como el más fuerte. Hay un elemento de corrupción en él, a menos que esté bien dignificado, su influencia a veces resulta prácticamente nula o extremadamente limitada e intermitente en su funcionamiento. Por consiguiente, uno puede esperar casos bastante extremos, por ejemplo, en el caso de un hombre con esta posición, puede que las mujeres le arruinen completamente, en tanto que otro pasará por la vida casi totalmente sin influencias de ellas. Para un hombre, las mujeres con las que se asocia el nativo tienden a ser muy sensuales, de voluntad propia y algo inescrupulosas para alcanzar sus fines. Pueden ser engañosas y traicioneras, esto, evidentemente, se aplica sólo a casos malos. Pero cuando la Luna del nativo se encuentra bien dignificada, se reunirá con el mejor tipo de mujer Escorpión; valiente, ambiciosa, emprendedora, y dotada de poder ejecutivo. Esto no quiere decir que, necesariamente las mujeres desempeñarán un papel muy importante en la vida de los nativos.

Las madres con hijos que tienen la Luna en Escorpión deben evitar que sus ambiciones para ellos ensombrezcan sus tiernas emociones. Deberían evitar influir en estos niños hasta tal punto como para interferir con cualquier talento latente o inclinación natural en la elección de una carrera.