Significado de Soñar con Hoja

Este es un símbolo del cual se debe tener presente el tipo de hoja con el que se sueña, pues existen diversos significados. Cabe aclarar que se puede soñar con las hojas de una planta, la hoja de un cuchillo o con hojas de papel.

Por lo general los sueños en donde vemos hojas de plantas hacen referencia al avance o retroceso de nuestros proyectos.

Si las hojas con las que soñamos están verdes es señal de que tendremos éxito en nuestros proyectos y gozaremos de tranquilidad económica. Si están marchitas o secas augura enfermedades y pesares.

En ocasiones es conveniente distinguir a qué planta pertenece la hoja con la que soñamos, pues así obtendremos una mejor idea de lo que el sueño nos quiere dar a entender.

Si soñamos con hojas de eneldo, ya sea que las veamos o las utilicemos como condimento, sugiere que hemos dado pie a rencillas y discusiones con personas cercanas, quizás vecinos, y esto generará problemas en nuestra convivencia diaria.

Soñar con hojas de higuera verdes es augurio de prosperidad y bienestar a nivel familiar, pero también indica a cuidar de nuestro comportamiento para así evitar cualquier discusión que pueda ocasionar sinsabores y contrariedades.

Las hojas de las palmas o palmeras son en su forma similares a las espadas, por lo tanto este símbolo en un sueño es señal del triunfo sobre nuestros adversarios o rivales en caso de tenerlos.

En caso de soñar con hojas de trébol sugiere que estamos pasando por una etapa de felicidad a nivel familiar y satisfacciones en el campo laboral, pero no es prudente relajarse mucho, pues este planta está relacionada al azar y la suerte, lo que pone sobre la mesa situaciones impredecibles.

Cuando en el sueño logramos distinguir hojas de abrótano, y nos vemos quemándolas insinúa que estamos dispuestos a hacer muchas cosas, no siempre las correctas, para atraer de nuevo a una persona.

En caso de soñarnos manipulando hojas de acanto, es una invitación a la moderación con nuestros gastos, pues es posible que dentro de poco se avecinen tiempos difíciles que pueden ser evitados, esto siempre y cuando hagamos caso al sueño y tengamos la disposición de ahorrar.

Si las hojas de acanto las está utilizando alguien más sugiere que existen algunas personas que, aun cuando no gozan de nuestro aprecio, son dignas de admiración. Este sueño invita a evitar envidias y celos por el éxito de otros.

Los sueños en donde aparecen hojas de álamo, chopo o todas aquellas que se caractericen por tener doble tonalidad, clara y oscura, hacen referencia a la necesidad de introspección. Estas hojas reflejan nuestros defectos y cualidades, por ello es necesario analizar los demás aspectos del sueño para comprender su significado.

Las hojas de col, lechuga y similares indican aspectos de nuestra personalidad, es muy posible que nuestra timidez o inseguridad nos estén privando de oportunidades positivas. Es necesario mostrarnos más como somos en realidad, sin importar lo que pueda pensar la sociedad.

Soñar con hojas de laurel o de encina presagia éxito, honores y distinción en el campo laboral o profesional.

Soñar que estamos caminando sobre una hojarasca y el sentimiento es placentero es señal de tranquilidad, estabilidad y paz a nivel familiar, no obstante, si el sentimiento nos desagrada advierte conflictos y discusiones con personas cercanas.

Los sueños en donde deshojamos la rama de un árbol suelen indicar que nos sentimos disgustados y heridos en nuestro orgullo por parte de alguien muy cercano, esta situación nos puede llevar a mostrarnos indiferentes ante ella. Este sueño no sugiere que la odiemos o no sintamos afecto por ella, sino que, por el contrario, queremos que entienda que cometió un error para que ello no se vuelva a repetir.

Deshojar hojas de libros, revistas o cuadernos en sueños indica que estamos pasando por un período de superficialidad, es posible que nos hayamos dejado deslumbrar por amistades que, a pesar de gozar de lujos y comodidades, se preocupan demasiado por las cosas materiales.

Si son hojas de papel con las que se sueña, es prudente tener claro en qué objeto las vemos, es decir, si las observamos en un cuaderno, un libro, una revista, etc. Pues en gran medida el éxito de la interpretación dependerá de ello.

Si las hojas con las que se sueña son las de un folleto indica que existen algunos aspectos de nuestra personalidad que deseamos resaltar.

Soñar con hojas de papel o folios amarillos o envejecidos sugiere que se gozará de una suerte inmerecida, la cual otorgará al soñante placeres efímeros y poco duraderos.

Si en el sueño nos vemos amontonando folios es señal de nostalgia, extrañamos otros tiempos en los que nuestro estilo de vida eran más favorables. Si las quemamos luego de amontonarlas indica que anhelamos cortar algunos puentes con el pasado, deseamos deshacernos de recuerdos que nos impiden continuar a nivel afectivo.

Las hojas metálicas, como lo es el caso de las chapas o las tejas son presagio de visitas y situaciones no deseadas, es muy posible reencontrarnos con personas que nos desagradan.

En caso de soñar con la hojas de un arma blanca, cuchillos, espadas, dagas, puñales, navajas, etc. Será necesario buscar el significado del instrumento como tal. Por lo general estos sueños hacen referencia a aspectos negativos de nuestra personalidad, como lo son la agresividad y la falta de tolerancia.

Soñar con un arma blanca cuya hoja está desafilada simboliza falta de elocuencia, lo que ha generado problemas de comunicación con personas de nuestro entorno, también sugiere situaciones negativas que a pesar de no tener mucha importancia, lograrán afectar la vida del soñante.

Si en el sueño nos vemos afilando la hoja de un cuchillo manifiesta nuestros anhelos por lastimar o herir a nivel psicológico a alguien que no nos agrada. Refleja rencor y deseos de venganza.

Si soñamos con la hoja de una cimitarra indica que deseamos lastimar verbalmente a alguien que nos ha agraviado valiéndonos de la hipocresía.

Soñar que manipulamos un cuchillo por la hoja, y esta es de doble filo indica que hemos caído en errores y que seremos víctimas de nuestras propias invenciones.