Tren, toros, niños y piedras
Querida Eratzi:
Que tal, como estas? Espero que bien; mejor que bien; estas ultimas noches he tenido sueños que me parecen tener algun aviso importante; la vez que te explique los sueños se cumplieron, mi hermana 4 le pidió a hermana 3 que cuidara a las nenas; una de ellas le ocurrió lo que te platique en el sueño; pero estos sueños no me parecen nada agradables y me han provocado temor.
Como siempre te agradezco muchisimo el tiempo que me regalas; tu valiosisima interpretación; mil gracias Eratzi; que Dios te bendiga en todo momento y en todo lugar; que te colme de cosas buenas; de situaciones favorables y hermosas para ti, para tus seres queridos-
Un abrazo fraternal y saludos de
Anna
Sueño del miércoles 3 al jueves 4 de septiembre 2013
Caminaba con mi esposo por la estación del tren; era muy grande, incluso habían caminos que te dirigían a varios destinos del tren, líneas del metro, etc., caminábamos para entrar al metro; la puerta era enorme, a lo ancho de pared a pared y de alta del suelo al piso; mi mamá entraba con mi hermana 3; bastantes personas también entraban; mi esposo y yo íbamos a entrar pero la enorme puerta se cerraba; nos quedábamos en la entrada; de pronto adentro descendía una gran escalera metálica color plateada era muy ancha casi como la puerta y descendía de la planta de arriba lentamente y bajaba mucha gente que tomaría el tren en ese andén, la escalera volvía a subir lentamente hacia la planta de arriba; se abría la puerta de cristal; entrábamos mi esposo, yo una mujer que sueño continuamente; era bajita, joven, morenita y más personas que entrarían para tomar el tren.
Estábamos esperando cuando todos se acercaban a la vía; yo también con mi esposo y la mujer joven que en ocasiones me acompaña en mis sueños; pensábamos que venía el tren y todos nos preparábamos para subir al tren pero en lugar del tren entraba un tanque de guerra; se detenía en la vía; todos mirábamos porque no entendíamos como un tanque de guerra pasaba en lugar del tren; se abría la puerta de arriba o escotilla no se como se llame; salía un soldado con un arma y subía al andén; luego una mujer de unos 30's alta, delgada, morena de cabello largo vestida de civil; atravesaba la vía y tomaba un metro que llegaba y subía mucha gente; ella buscaba un lugar en alguno de los vagones todos iban llenísimos, a ella no parecía importarle, algunos se hacían a un lado para que subiera y ella entraba a ese metro; el metro no cerraba las puertas por ir tan lleno y se iba.
El tren que esperábamos no llegaba pero me daba cuenta que la gente atravesaba las vías sin ningun temor; incluso se sentaban; otra vez se empezaban a llenar los andenes e incluso las personas bajaban a las vías, las atravesaban de un lado para el otro; el tanque de guerra también había partido.
Pensaba yo que eso era algo ilógico que no podía pasar; que era mucho riesgo al que se exponían las personas y le comentaba a la joven que estaba a mi lado: - Creería que esto es un sueño sabes? Porque esto puede suceder en un sueño ya que en ellos hay sucesos, imágenes poco lógicas; pero esta sucediendo. Ella asentía con la cabeza.
Mi mamá mi hermana 3 caminaban detrás de mi esposo y de mí entrábamos a un restaurante muy sencillo no tan grande; los manteles de las mesas eran blancos; en la parte del fondo estaba una barra donde estaban los que preparaban los alimentos, y cobraban; del lado derecho en la esquina contra pared había un altar, estaba la Virgencita; pero al lado y un poco adelante estaba una estatuilla de un demonio color rojo que estaba en cuclillas, sus ojos eran 2 lentejuelas rojas brillantes; tenía las orejas dobladas como los perros que tienen orejas grandes y se les doblan; cara de gárgola; yo sentía mucha ira y odio cuando lo veía, empezaba yo a flotar y quería irme contra el y enfrentar una gran pelea, no podría contener ni la ira ni el odio en contra de él demonio; el me miraba con odio y tambien estaba dispuesto a pelear conmigo; de pronto había a mi lado alguien flotando sentí su delicada mano sobre mi hombro, veía una parte de su ala; su luz y escuchaba su voz dulce en mi oido:
-Detente, no lo hagas; hasta el necesita un poco de piedad; no lo odies; hasta el necesita de alguien que lo perdone, que no lo odie; el mal no se vence con la ira, con el odio, el mal no se vence con el mal; vence con el amor, con el bien.
El demonio me miraba intentando adivinar mis pensamientos o mis movimientos y asentía a lo que aquel hermoso ángel me había dicho; yo sentía paz, tranquilidad y el odio e ira desaparecieron que sentía hacia el demonio.
Sueño del jueves 5 al viernes 6 de septiembre 2013
Me bajaba de un microbús frente a Liverpool Polanco, iba con mi mamá, una de mis hermans (no recuerdo bien quien); una mujer alta delgada; de cabello muy oscuro muy blanca que iba vestida de color azul y su traje era ejecutivo.
Entrábamos a Liverpool y comprábamos algo en la sección de dulcería; nos formábamos para pagar mi mama iba adelante con mi hermana, luego yo con aquella señora; cuando se abría la puerta de cristal y entraba una corte que anunciaba a la reina de creo que era la reina de Inglaterra; entraba ella tan elegante y comenzaba a comprar; nos veía a la señora de azul que se supone éramos muy amigas en el sueño porque no la conozco fuera del sueño; ella nos miraba con detenimiento y le decía a uno de sus ayudantes; dales trabajo a estas señoritas; me gustan, quiero que sean mis damas de compañía; que preparen los eventos, que esten preparadas cuando tenga yo que viajar; en fin, que sean mis auxiliares directas, que vayan siempre conmigo; me parece que son inteligentes, me gusta su presencia y su plática debe ser amena y culta.
MI amiga y yo nos mirábamos aun asombradas; la reina o su ayudante no recuerdo me daban una chaqueta blanca, falda blanca y zapatos blancos, me decían que organizáramos una celebración que la reina deseaba con personas muy importantes de América; Europa y del Oriente.
Mi amiga era muy dinámica, llegábamos a un lugar muy grande enorme y con una construcción asombrosa por todo lo que contenía; había una gran terraza con una vista bonita por los árboles que habían; el pueblecito se podía ver; mi amiga daba órdenes decorar la mesa; como uniformar a las personas que servirían; que platillos, etc., los invitados de la reina empezaban a entrar; mi amiga estaba impecable; yo al estar decorando, limpiando, poniendo la mesa no estaba aun arreglada; sabía que la reina también tendría más eventos y no me preocupe mucho si me ausentaba; pero ella me veía y me decía: no puedes estar aquí así, ve a ponerte la ropa que te dí; mi amiga me miró un poco molesta; se sentó del otro lado de la mesa; es decir al otro extremo y la reina quería que me sentara a su lado.
Corría yo para cambiarme pensando en la ropa blanca que debía ponerme; entraba a un estadio pero era digno de la reina porque los asientos eran de madera fina; habían también unos pedestales que estaban rodeados de barandales también de madera estaban colocados mas altos que los asientos; que se encontraban en los 4 puntos cardinales; parecía un ruedo por la redondez de la construcción; en la parte de abajo habían algunas puertas; había una separación del rodeo o campo de concreto y los asientos; un hombre corría y subía los peldaños gritando: huyan! Corran! Ya sueltan a los toros! Y yo preguntaba: - Que toros? Pensaba que si era posible que fuera parte de otro evento o que era? Yo espantada intentaba subir los peldaños pero eran muy altos; veía que mucha gente corría para ocultarse y ponerse a salvo sin ninguna dificultad; había un hombre en la parte de arriba que iba a entrar por una puerta que llevaba a la reunión de la reina yo le gritaba por su nombre (no lo recuerdo); era un hombre de unos 50's; de cabello canoso, alto, delgado, ojos claros, bien vestido, le gritaba que por favor me ayudara porque no podía subir los peldaños porque eran muy altos y los toros no tardarían en salir, comenzaba a ver que había por allí algun toro; el hombre bajaba para ayudarme pero tampoco llegaba tan rápido porque parecía un laberinto para poder llegar hacia mi; yo le decía: - Mejor vete, sino te alcanzaran los toros; pero el seguía buscando como llegar hacia mi; yo intentaba subir, pero sentía muchísima debilidad, sentía como si la fuerza se me fuera; sentía desfallecer y hablaba muy lento, sin fuerza. – Por favor, ayúdame, no puedo más; en eso un toro subía los peldaños muy rápido, me levantaba un poco porque parecía que yo no podía ni levantarme; ponía mi mano derecha para detenerlo; el empujaba mi dedo índice con su cuerno y le decía al hombre: - Por favor, apresúrate, no puedo más; el toro presionaba mi dedo con su cuerno; yo tenía mucho miedo pero mi debilidad, mi desfallecimiento era mayor que el temor; sentía como si me faltara el aire, mis ojos se empezaban a cerrar; me levantaba un poco con mucha dificultad y en lugar del toro era una vaca color blanca con negro bonita con su bebe color café y otras vacas andaban por allí también veía que algunas cebras entraban por entradas (no había puertas); veía que era la vaca con su cabeza en forma tranquila y quizás amistosa que presionaba mi dedo.
Sueño del viernes 6 al sábado 7 de septiembre 2013
En el patio de la casa de mis padres estaban mis primos (adultos) como si fueran niños; sus hijos también como niños; mis sobrinitas también; todos jugaban en el patio.
Había un salón de fiesta donde estaban mis tíos, muchas personas; todos se sentaban en familia y veía como si estuvieran proyectando una película que entraba Homer Simpson al salón de fiestas comentándole a al hombre que recibía a los invitados algo que Marcch y Liza no debían saber; era algo cómico; pero ellas lo escuchaban y March exclamaba: Homer! Luego tomaban asiento como todos en otra mesa; una mujer decía que la Srita. Edna Krabappel, que había ofrecido ya aceptado salir en un video desnuda para demostrar que una mujer madura también podía ser sexy, femenina como la más joven y que habían otros valores más importantes en la mujer; entonces todos los caballeros se quedaban en silencio y atentos para que pusieran los videos; algunos ya comenzaban a silbar antes de que comenzara el video; comenzaba el video; Homer ya estaba muy atento con los ojos abiertos y la boca abierta por la admiración; los demás caballeros también; yo veía un poco el video y me alegraba que ella estaba tapada con una sustancia verde como gelatina que no permitía verla completa; la mujer anfitriona decía por el micrófono: La mujer madura también es bella y no necesita lucirse desnuda para ser sexy lo ven caballeros; yo me reía porque ellos esperaban más y la Srita. Edna Krabappel les había dado una lección.
Luego llegábamos a la casa de mis padres; intentaba mimar a mi esposo pero él me ignoraba; yo me molestaba; ya no sabía que más hacer para que me tomara en cuenta porque el seguía ignorándome; así que yo me disgustaba mucho; el se iba; y yo me iba con mis sobrinitas a acompañarlas en sus juegos al igual que a mis primos (adultos); que parecían niños; entonces mi papi entraba y yo le pedía que no se fuera que se quedara me preocupaba que saliera por su estado de salud, pero el se salía tampoco me hacía caso y yo me quedaba preocupada; los niños se subían a una de las recámaras de la planta de arriba de casa de mis padres; todos estaban haciendo manualidades en mesas redondas, pintando, jugando con plastilina, jugando con juguetes didácticos, etc., yo los miraba y participaba un poco en sus juegos; luego mi papi, mi cuñado el papa de las niñas, mi esposo, el esposo de mi hermana 3 subían, se sentaban en un sillón grande y conversaban; habían ventanas grandes y veía que habían niños que tiraban piedras a las ventanas mientras gritaban palabrotas a mis sobrinitas, a mis primos, a sus hijos (todos eran niños; aunque mis sobrinitas si son pequeñitas aun); los niños eran niños sucios, parecían resentidos yo tenía miedo por los niños porque veía que cada vez aventaban más piedras a las ventanas; mi sobrinita se asomaba y las piedras comenzaban a entrar a la recámara los señores (mi papi, mis cuñados, mi esposo) no hacían nada, seguían conversando entre ellos; una piedra golpeaba a uno de los niños de la casa y con su mano se sobaba; me daba mucho coraje y salía y les decía a los niños: - Basta! Llamaré a la policía! Le diré a la policía lo que estan haciendo!
Los niños de afuera corrían cuando escuchaban que yo llamaría a la policía; pero había un niño negrito pequeño que era quien los incitaba a no abandonar y seguir apedreando y les decía que me dieran a mi pero con palabrotas; los niños volvían con valor a aventar piedras por las ventanas y al ver yo que casi le daban a mi sobrinita bajaba y veía al niño y le decía: Niño! Vete! Avisaré a la policía y a tu mamá no le dará mucho gusto saber que su hijito lo tiene la policía por sus fechorías! En eso se acercaba una mujer negra gordia como la de los hotcakes; parecía un dibujo animado; al igual que el niño; ella lo buscaba y había un charco, sin querer, ella lo tiraba y lo pisaba, pasaba sobre el niño; los niños de casa se reían sin parar, la escena era graciosa porque la mujer lo buscaba y no lo encontraba; el niño era tan pequeño que había caido en un charco y ella estaba sobre el niño; el niño con sus ojos grandes muy abiertos y ella al darse cuenta, lo tomaba de un bracito como si fuera de trapo lo sacudía y lo limpiaba con los dedos de sus piés y le decía: Vamo negrito, vamo con tu mamá que no le va a parecer nada bien lo que le haces a esta señorita ni a los niños y se llevaba al niño del bracito como si fuera de repente un muñequito de trapo. La escena era tan graciosa que nos reíamos mientras el niño peleonero quedaba sometido como un pequeño muñequito de trapo.
Los niños volvían a bajar al patio a jugar y yo veía a mi papi que se sentaba en el sillón de la sala como si estuviera triste y me decía: Ay hija, ya ves que salí? Sabes que pasó? Que la carpintería estaba cerrada
Yo pensaba: - Claro, es domingo y no es temprano.
Luego subía y veía que en pasillo en la orilla de las escaleras del lado derecho había tierra en el suelo en forma de cuchilla (como una avenida o calle que termina en cuchilla); no había ninguna escoba y veía colgada bastante ropa en el barandal y tomaba una playera negra y recogía la tierra, me daba cuenta que era como si hubieran quitado parte de los azulejos del suelo para hacer eso; poner tierra; habían unos pequeños arbolitos muy pequeños que estaban creciendo en la orilla del agujero que no era más profundo que 5 mm en forma de cuchilla; bajaba con la playera negra con la que recogía la tierra para tirarla en alguna maceta o bote de basura y luego echar a lavar la playera negra.
Luego me daba cuenta que una muela de la parte de abajo del lado derecho el primer premolar se estaba rompiendo como cuando pelas una manzana; se caían pedazos de mi muela y yo muy disgustada los quitaba de la boca y los tiraba; pero me daba cuenta que había una parte de mi muela en forma de tira como cuando pelas una manzana (la cáscara) y la veía blanca y pensaba: La guardaré de recuerdo de mi muela y ahora tendré que ver al dentista para que me haba un implante.