Significado de Soñar con Tsunami

El océano es un símbolo de la mente subconsciente, así como de las emociones abrumadoras que pueden surgir de un lugar tan profundo. Las olas del mar simbolizan emoción y lujuria; un mar en calma sugiere una existencia tranquila y pacífica, en tanto que un mar tempestuoso denota pasión, que puede ser positiva o negativa. Los tsunamis son olas gigantes resultado de los terremotos, que son símbolos de una gran interrupción que llega después de una acumulación de presión; soñar con tsunamis, por lo general denota la inevitable agitación emocional resultante de cambios inesperados en nuestro actual panorama. En nuestros sueños, las olas representan la actividad amenazante y a veces tormentosa de la mente consciente, pero también simbolizan una emoción trascendente, abierta y expresiva. Un sueño con tsunamis puede ser bastante recurrente y usualmente se relaciona con la forma en que los ciclos emocionales de la vida pueden resultarnos desafiantes y abrumadores.

Qué significa soñar con tsunamis

Soñar con tsunamis, tormentas, tornados o huracanes a menudo es símbolo de argumentos verbales continuos, peleas y tensión emocional que ocurren en una relación. Los tornados se componen de viento que se mueve muy rápido, al igual que el aire sale de la boca muy rápido durante una discusión, de manera similar, los tsunamis son grandes cuerpos de agua, la cual es símbolo de nuestras emociones, en violento movimiento; con esto en mente, cuando en nuestros sueños se presenta un huracán, un tornado o un tsunami, es necesario que analicemos todo cuanto ha ocurrido recientemente en nuestra vida despierta. Por ejemplo, es posible que hayamos tenido una discusión con alguien o que estemos aun en medio de ella. Este tipo de sueños puede sugerir que somos personas demasiado emocionales y propensas a estallidos emocionales, o quizás estamos sintiéndonos como si fuésemos arrastrados por fuerzas que se encuentran fuera de nuestro control, aunque también pueden simbolizar la pasión desbordada de alguien más.

Los seísmos, temblores o terremotos responsables de causar los tsunamis, se producen cuando las placas tectónicas del planeta se desplazan por debajo de las profundidades de los océanos, este desplazamiento de algo tan masivo, generalmente representa un llamado a que exploremos nuestro subconsciente, estas grandes masas representan un reservorio masivo de sentimientos, comportamientos, impulsos y recuerdos que por alguna razón permanecen ocultos en la profundidad, un tsunami puede estar presentando al soñador algo que desconoce o elige ignorar. Las olas sísmicas del océano son una fuente de gran peligro, aterradoras tanto en su fuerza como en su imprevisibilidad. Las crisis cotidianas pueden tomar en nuestros sueños la forma de esas olas gigantescas, por lo que es importante que aprendamos a enfrentarlas. Soñar con tsunamis también puede suceder porque sentimos perder el control o nos sentimos abrumados o impotentes. Como con todos los símbolos en los sueños, el significado de los tsunamis en los sueños varía de persona a persona, aunque los aspectos fundamentales para la interpretación del sueño parecen tener la misma naturaleza subyacente, es decir, sentimientos de miedo, falta de control y tener que enfrentar en el sueño una posible muerte, aterradora, súbita e inminente. El terremoto causante del tsunami representa un cambio importante en nuestra vida, aunque este cambio puede llegar con un cierto nivel de incertidumbre, dejando saber que hay una acumulación debajo de la superficie que necesita surgir, sacando a la luz una conexión entre la mente consciente y la subconsciente.

Símbolos tales como los tsunamis emergen metafóricamente aferrándose a la mente del soñador e intentando amplificar algún peligro que puede estar acechando en lo desconocido. Posiblemente, las emociones que se presenten en nuestros sueños parecerán imitar alguna experiencia pasada, algo que se refleja en el momento presente o que presagia eventos que llegarán en el futuro, el contexto del tsunami en un sueño debería proporcionarnos pistas específicas sobre que buscar. Este tipo de sueños suelen referirse a nuestras relaciones, la vida familiar o los amigos, el trabajo o la carrera, la salud o las finanzas, nuestra estructura personal, nuestras actitudes, comportamientos o impulsos.

Positivamente, si en el sueño hemos sido víctimas de un tsunami y hemos sobrevivido a este tipo de desastre natural, es muy posible que en nuestra vida cotidiana logremos superar cualquier tipo de evento. A pesar de lo aterrador que estos sueños pueden llegar a ser, deben ser utilizados como una herramienta que nos ayuda a entender nuestro lado más emocional; una vez que el problema es sacado a la superficie, sin importar cuan aterrador se presente, en el momento en el que ya no sea un desconocido para nuestra mente consciente, dejará de ser un problema, o, por lo menos, podremos entenderlo mejor y su gravedad será mucho menor.

Soñar con tsunami y olas gigantes

Soñar con las olas gigantes de un tsunami o una marejada, puede ser un sueño desastroso y suele indicar algún tipo de evento traumático en nuestra vida, pero también puede ser un síntoma de que estamos perdiendo el control de algún aspecto de nuestra vida. A menudo, los tsunamis, las olas gigantes, y en cierta medida, las olas en general, representan una cascada de emociones o cambios recurrentes en nuestra vida. No es inusual que el sueño de ser arrastrado por una ola se le presente a alguien que está luchando con una situación difícil, como la pérdida de un trabajo o una enfermedad que esté padeciendo algún miembro de su núcleo familiar, especialmente al soñar con un tsunami de proporciones gigantescas. Una ola, o la subida repentina de la marea, en este caso representa la devastación emocional que ocurre cuando las situaciones cambian de maneras inesperadas o no deseadas.

La ola de nuestro sueño puede representar emociones, cambios, o a otras personas, sin embargo, quizá la mayor implicación de este símbolo es la necesidad de aceptar que ya se está en medio de ella, y lo más probable es que no consigamos nada al intentar negarla o huir de ella, es necesario enfrentarla; lo mejor que podemos hacer es montar esta ola, aceptar que podemos sentirnos agobiados por algún tiempo, pero siempre sabiendo que se trata de una situación que no es permanente, ya que la tormenta seguirá su curso, pero al final podremos salir más sabios y fuertes.

A pesar de que son muy pocas las personas que en su vida normal hayan experimentado un tsunami o una ola gigante, este tema suele ser bastante común en las pesadillas; particularmente, suelen ocurrir cuando una persona ha sufrido una experiencia traumática. Aunque también podría ser algún otro tipo de evento asfixiante y desastroso el que se presente en el sueño, por ejemplo, los sobrevivientes de incendios, después de su experiencia, con frecuencia reportan sueños con fuego, pero también sueños en los que son arrasados por tsunamis; si bien estos dos eventos, fuego y tsunamis, pueden parecer totalmente opuestos, en realidad comparten características comunes. Cuando una persona muere en un incendio es raro que la causa de su muerte sean quemaduras en su cuerpo, la mayoría de las veces la persona muere asfixiada por inhalación de humo; las sensaciones físicas de asfixia por falta de oxígeno que pueden llevar a la muerte son comunes en los dos sueños, por disimiles que a primera vista parezcan. No obstante, independientemente de las experiencias traumáticas que una persona pueda o no haber sufrido, este tipo de sentimientos son compartidos por todas las personas.

Soñar con tsunamis o inundaciones

Soñar con una inundación que anega nuestra casa, o a otros edificios, o ver las calles inundadas, pero sin que hayamos sido heridos por esta causa, y a pesar de que no nos conste que esta inundación haya sido causada por un tsunami o una ola gigante, significa que hemos aceptado algunos cambios en nuestra vida y que los estamos aprovechando al máximo, a pesar de que hayamos debido atravesar una experiencia emocionalmente turbulenta.

Un sueño relativamente común es el de encontrarnos en medio de una inundación, quizá con alguna ruta de escape, pero siempre encontrándonos aislados, de alguna manera nos resulta imposible movernos de nuestra posición en la que sólo podemos esperar a ser rescatados. Para la interpretación de este sueño es conveniente darnos cuenta que la inundación es una metáfora que hace que nos sintamos impotentes para movernos, tal vez porque no contamos con el equipo necesario, que puede ser dinero, tiempo o recursos, y denota que nuestra única opción es esperar pacientemente, sin embargo, el agua producto de una inundación no es una situación permanente y siempre tiende a disminuir, por lo que algo que nos está rodeando ahora, como el estrés emocional, el exceso de trabajo o las preocupaciones familiares, finalmente, con algo de tiempo, va a filtrarse o evaporarse.

El hecho de encontrarnos en un sueño sumergidos en el agua apunta hacia nuestro lado más emocional, sin embargo, debido a la fuerza poderosa e impredecible del agua nos vemos obligados a examinar algo que está dentro de nosotros pero que no podemos ver. Estos sueños pueden ser bastante comunes y, como ya se había mencionado, suelen ser símbolo de nuestra ansiedad y otras emociones fuertes asociadas con un cambio importante en nuestra vida. A veces, hacen alusión a algunas emociones que hemos estado refrenando; el sueño en sí, nos quiere decir que, si seguimos enterrando estas emociones, inevitablemente llegarán a nosotros como una enorme pared de agua.

Significado de soñar con tsunamis

Soñar con un tsunami es muy similar en significado a ahogarse, sin embargo, a diferencia de ahogarse, el cual es un proceso lento y gradual, un sueño con un tsunami sugiere un cambio poderoso, impredecible y repentino que puede llevar nuestras emociones al límite. En los sueños, un tsunami puede llevar un mensaje crucial y mostrar, simbólicamente, la escala de turbulencia emocional experimentada por quien está soñando. En términos generales, si en nuestro sueño hay agua en forma de masivas olas rompedoras, es posible que estemos sintiendo que perdemos el control sobre algo. Agua de mar que fluye libremente, primero en olas suaves que luego se convierten en tormentosas, usualmente es una indicación de que estamos sacando a flote nuestras emociones. Soñar que camínanos sobre olas, que bien pueden ser tsunamis, comúnmente es presagio de que superaremos los obstáculos que nos están separando de nuestros objetivos. Un sueño en el que notamos que estamos siendo tranquilamente arrastrados por las olas, indica una actitud pasiva hacia las circunstancias, es posible que pequeños detalles nos estén distrayendo de nuestras metas. Por otra parte, un mar picado anuncia un posible conflicto emocional, es posible que se presenten celos y envidia; en cualquier momento podría haber un estallido de esta situación, sin embargo, será una situación temporal.

Un sueño en el que aparecen olas gigantes, que, por ejemplo, arrasan una playa, y nos sentimos preocupados por las personas que allí se encuentran, quizás buscando la forma de intentar ayudarles, quiere decir que estamos preocupados por alguna persona de la que nos sentimos responsables, posiblemente porque no creemos que esa persona sea capaz de manejar alguna situación, por lo general, de tipo emocional.

Soñar con un devastador tsunami que destruye todo a su paso, y que no vemos que quede nada sobre lo que podamos construir una vida nueva, suele ser reflejo de nuestras propias emociones; a pesar de que es probable que sintamos que no queda nada, es importante tomar nota del mensaje positivo implícito aquí, es decir, que debemos seguir adelante y considerar seriamente un cambio, tal vez creando un entorno enteramente diferente para nosotros. Este sueño nos insta a dejar lo que ya es insostenible.

Soñar con un tsunami y salir ileso

Soñar con un tsunami u ola gigante acercándose a nosotros, sin que tengamos medios aparentes para ponernos a salvo, suele ser indicador de nuestra ansiedad o temor con respecto a algún cambio en nuestra vida que sabemos es inevitable, o nuestras emociones parecen ser demasiado intensas para soportarlo. Por otra parte, si en nuestro sueño vemos que viene una gran ola, pero cuando llega a la costa resulta no ser tan grande como pensábamos, simboliza que podremos manejar muy bien un próximo cambio, o que en realidad no estamos tan contrariados como creíamos.

Si en nuestro sueño vemos que un tsunami viene hacia nosotros, y que logramos aferrarnos a algo para evitar ser arrastrados, y que todo esto nos produce dolor, pese al cual seguimos luchando por salvarnos, pero logrando finalmente salir ilesos, o al menos vivos de este trance, sugiere que lograremos superar alguna situación en nuestra vida, pero que requerirá de nuestra lucha en algún grado. Este sueño también denota que pese a las turbulencias cotidianas, particularmente de tipo emocional, demostramos resiliencia, el sueño claramente habla sobre la supervivencia. Un buen plan sería dedicar algunos minutos para meditar respecto a la razón por la que nos sentimos perseguidos por un tsunami, preguntándonos si la vida nos ha golpeado demasiado, o hemos sentido que estamos a punto de ahogarnos emocionalmente, pero siempre recordando nuestra fuerza interior.

Soñar con un tsunami de agua limpia

En términos generales, la calidad del agua que aparece en el sueño es reflejo del propio estado emocional del soñante; si el agua es limpia y clara, es señal de sentimientos y emociones puras, tranquilidad y paz. Soñar con un tsunami de agua limpia y cristalina puede convertirse en un muy buen presagio y por lo general indica sentimientos puros, particularmente, si el tsunami ocurre sin causarnos daño alguno, muchas veces es indicio de que a pesar de que podamos sentirnos agobiados por alguna situación, usualmente emocional, al final, saldremos airosos y más sabios. Este sueño incluso podría estar anunciando la realización de nuestros deseos.

Soñar con un tsunami de agua sucia o lodosa

Por otra parte, si el agua del tsunami en nuestro sueño aparece turbia, llena de lodo o sucia, a menudo indica enfermedades o dificultades personales. Un tsunami, o incluso una inundación, de aguas oscuras, lodosas o sucias normalmente representa negatividad, con frecuencia algo que algún enemigo está pronto a presentarnos. Es necesario para interpretar correctamente este sueño, tener en cuenta que, en general, las aguas sucias y estancadas, aun si estas fluyen, son indicador de maldad, corrupción, deshonestidad.

Soñar que nos hundimos en el agua sucia que trae el tsunami o que bebemos de esta agua suele también indicar que podríamos estar cayendo en serios errores, por los que pronto empezaremos a sufrir sus naturales consecuencias. Las consecuencias tienden a ser peores si soñamos que nos ahogamos en esta agua.

Por lo general, en sueños, el agua sucia, lodo pestilente y peor si aparece movido por una tormenta, o un tsunami en este caso, suele anunciar riesgos, peligros, tristezas; y la posibilidad de una mala racha. Particularmente, si el agua sucia del tsunami o la inundación anega nuestro hogar, simboliza que nos rodean enemigos, más posiblemente ocultos, que intentan perjudicarnos. Si en el sueño aparecemos intentando sacar dicha agua de nuestra casa, pero sin embargo el nivel sigue aumentando, subiéndonos por los pies, es indicio de enfermedades, ruina y desgracias personales y familiares. A pesar de la fatalidad que pronostica, no suele tratarse de un destino fijo e inexorable, sino más bien de una advertencia para que prestemos mayor atención a nuestros asuntos.

Soñar con sobrevivir a un tsunami

El ser engullido por las olas del mar puede ser una forma de revelar el temor hacia nuestras emociones reprimidas y nuestra lucha por hacer que estos sentimientos sigan formando parte de nuestra intimidad. La fuerza destructiva del tsunami podría representar un conflicto emocional que ha sido reprimido o algo fuera de nuestro control. No obstante, ser asfixiado por una ola también puede representar sentimientos de opresión de parte de nuestra madre o alguna otra figura materna en nuestra vida. En este sentido, soñar que escapamos de un tsunami implica que posiblemente no estamos enfrentando nuestros temores relacionados con nuestras emociones. Asimismo, si en lugar de enfrentar el tsunami optamos por escondernos, sugiere que preferimos ignorar un asunto importante en nuestra vida. El contexto general, la ubicación y las personas a nuestro alrededor podrían ser importantes para determinar a qué área de nuestra vida puede estar apuntando este símbolo. Soñar con un tsunami que ataca nuestra casa sugiere que de alguna manera nuestra psique está involucrada.

En cualquier caso, el hecho de huir o escondernos del peligro manifiesta que posiblemente seamos incapaces de confrontar o lidiar con algunas emociones que permanecen en nuestro subconsciente. En muchos casos, esta es razón para que los sueños con tsunamis se presenten recurrentemente. No obstante, una vez que logremos identificar lo que hay allí, podremos llegar a la raíz del problema, lo que nos debería permitir intentar solucionarlo.

Sueños recurrentes con tsunamis o inundaciones

Soñar con tsunamis recurrentemente se relaciona también con aquellas perturbaciones emocionales inestables que han ocurrido en nuestro pasado y que permanecen en nuestro subconsciente. Con frecuencia, este sueño insinúa que debemos examinar con profundidad esos sentimientos y emociones que aún nos están afectando; así como el tsunami en nuestro sueño nos controla y se apodera de nuestra tranquilidad, igualmente refleja cómo ese evento puede estarnos agobiando. Comúnmente, soñar con un tsunami ocurre recurrentemente en épocas en las cuales estamos a la expectativa de algún evento con el potencial de afectar nuestras emociones.

Significado bíblico de soñar con tsunamis

Las olas, o bien un tsunami, bíblicamente pueden ser vistas como símbolos de desafíos que debemos superar dentro de nosotros, siempre teniendo fe. La clave para la interpretación es la fe; en Santiago 1:6 – “ Pero pida con fe, no dudando nada; porque el que duda es semejante a la onda del mar, que es arrastrada por el viento y echada de una parte a otra. ” . En este mismo sentido, en Mateo 8:23–27, tenemos: “Y entrando él en la barca, sus discípulos le siguieron. Y he aquí que se levantó en el mar una tempestad tan grande que las olas cubrían la barca; pero él dormía. Y vinieron sus discípulos y le despertaron, diciendo: ¡Señor, sálvanos, que perecemos! Él les dijo: ¿Por qué teméis, hombres de poca fe? Entonces, levantándose, reprendió a los vientos y al mar; y se hizo grande bonanza.”

Generalmente, las tormentas representan algo que Dios o el enemigo están a punto de hacer, trátese de una tormenta eléctrica, un tornado, un huracán o un tsunami, las fuerzas geofísicas en los sueños a menudo representan algo que viene en el espíritu que cambiará el estatus en la vida del soñador. Si la tormenta es brillante con mucha luz y color, podría representar algo que Dios está a punto de traer. Si es una tormenta oscura, normalmente representa algo que el enemigo está a punto de traer. En la Biblia, el viento, el agua, las olas, los rayos y los truenos simbolizan el poder de Dios, pero también pueden representar el poder del enemigo; las fuerzas de las tinieblas.

La Biblia utiliza constantemente eventos geofísicos y tormentas para describir metafóricamente lo que sucede en el reino espiritual, ya sea bueno o malo, los sueños actúan de la misma manera. Los tsunamis u otros fenómenos naturales catastróficos son una imagen metafórica de los desafíos de la vida; ya sea que se trate de una tormenta iniciada por Dios o por el enemigo, nuestras vidas se transforman a través del caos. A partir del caos, si lo permitimos, Dios puede crear un orden superior en nuestras vidas.

Determinar quién ha enviado el tsunami, el terremoto, o la tormenta de nuestros sueños es de gran importancia. Un sueño causado por nuestros enemigos suele ser oscuro y siniestro, y más probablemente ocurrir en las horas oscuras del día, por otra parte, si es Dios quien la envía, puesto que Dios es luz y no hay oscuridad en él, las tormentas que envía más probablemente serán blancas, brillantes o llenas de colores vivos y ocurrir en horas tempranas.